INFELICIDAD EN LA SOCIEDAD

Lic. Margarita Szlak de Cederbojm

Este es un momento mundial muy movilizante, pues hay un aislamiento no deseado …incluye a todos…Y, desde ya produce infelicidad.

Hoy más que nunca estamos en una realidad inesperada, que irrumpe en nuestras vidas tan sin aviso que yo por mi parte me siento convocada a pensar y escribir sobre lo inédito. Sobre los acontecimientos excepcionales y siniestros de esta pandemia que desbordan lo pensable. Pero me doy cuenta que estoy colmada de interrogantes que todavía no se responderme

Parecería ser que hay que pensar en lo no pensado jamás y eso nos desaloja de nuestra vida cotidiana y nos empuja hacia un afuera del tiempo tal y como lo conocemos. Los días y las noches transcurren y así las semanas también van pasando sin darnos cuenta.

¿Tal vez es tarde? ¿Tal vez es demasiado temprano? O es la pérdida de la noción de tiempo que está fuera de nuestra consideración?

¿Cómo hacer en estos momentos tan angustiantes para no enloquecer si vivimos aislados, confinados a nuestros hogares, sin distinción de clases sociales ni rangos etarios ,para no contaminarnos de un presente peligroso y continuo que es traumático en si mismo además de incierto?

Lo cierto es que el corona virus expone la posibilidad de lo real y, ahora la civilización sabe que es mortal y que tiene un profundo efecto en la subjetividad.

¿que hacer? ¿Sumergirnos en la desesperanza colmando nuestro propio ser de pulsión de muerte donde los medios de información parecen regodearse con el dolor como si hubiera un medallero olímpico de las muertes…o tratamos de hacer como diría Freud, enfrentar con nuestro mejor semblante como fue en las postrimerías de la gran guerra, apostando a la vida?

Ante lo inédito ¿cómo sobreponerse entonces a lo que nadie espera? Giorgio Agamben opinaba que lo inédito se inscribe en lo arcaico, en algo anterior y eso es típico pues siempre se rastrea alguna vivencia, experiencia o historia anterior en donde esta nueva pueda sujetarse y comprenderse. Por eso el estar confinados en la casa para algunos es resignificar la época de la mal llamada epidemia española de 1918 ,o la época del Holocausto, también para algunos puede recordar la epidemia de parálisis infantil, o los años del proceso militar , el toque de queda con su prohibición etc.

También para otros esta situación anómala en que vive toda la sociedad puede hacer evocar obras de literatura como 1984 donde se esboza ahí el “ gran hermano” parecido a lo que hoy te dicen todos los medios por tu bien “ quédate en casa” ,pero también “Rebelión en la granja” donde los cacerolazos replican sin cesar por un descontento contra los que administran justicia , recordando al genial George Orwel.

Para el psicoanálisis la posibilidad de percibir en lo más reciente las marcas del pasado, de lo que ya ocurrió, de lo arcaico es saber leer entre líneas, es saber ver en la oscuridad, a pesar de que esto nos puede arrojar a lo desconocido de los sujetos a quienes tratamos de ayudar , pero que finalmente y en el mejor de los casos, develamos parte de su verdad. Es así como la interpretación en Psicoanálisis adviene inesperadamente, pues es como la emergencia de lo inesperado tanto para el paciente en asociación libre como para el analista con su atención flotante.

Debemos estar preparados para esperar lo inesperado, pero ¿cómo abordar este acontecimiento si estoy metida en él? Sería como vestirme con una ropa que no he comprado todavía o como habitar una casa mientras se la está construyendo, o tal vez como actuar en una obra de teatro que no está escrita aún.

Esta problemática del tiempo es como si se hubieran cortado los hilos de la continuidad de lo que hasta hace poco tiempo todos estábamos preocupados y quedaron en puntos suspendidos pues el covit 19 acaparo y, no es para menos nuestra atención y ocupación, me refiero a:

• 1) La problemática de las inmigraciones
• 2) El avance del capitalismo neo -liberal y su problemática financiera
• 3) El calentamiento global
• 4) El crecimiento de los partidos de la ultraderecha
• 5) La preocupación de estar en la era de los robots en reemplazo del hombre
• 6) El avance de la tecnología y la inteligencia artificial

Cuando uno piensa que todos estos planteamientos de problemas han quedado en otro plano , no se puede creer este trastrueque del orden universal pero si se entiende cuando uno comprende la hiper potencia de la naturaleza en este caso el virus que se desparrama y amenaza la fragilidad que padece nuestro cuerpo humano que algunos pueden resistir pero otros se extinguen; pero fundamentalmente comprende la insuficiencia de las normas que regulan nuestros vínculos humanos ya sea en la familia, en el Estado y la sociedad en general.

S. Freud nos enseña que hay cuatro condiciones que se dan en un sujeto y que conviven ; como modelo, como objeto , como auxiliar y como enemigo.

En pandemia es la condición de enemigo que más abunda y se “consume”: el otro es alguien que puede enfermarnos , contagiarnos y matarnos y esto puede ser aún bajo la forma del amor o la amistad.

La mayoría de la gente en nuestra sociedad está asustada, alarmada además, y esto no es por el virus sino por algo que se venía vislumbrando y que es la desidia de la justicia?

Me refiero a este último acontecimiento que fue el enterarnos de la liberación de miles de presos comunes (criminales, violadores, ladrones o con delitos menores sean robos etc) ya sea por haber concluido su condena o no, creo yo que todoas esta liberaciones fueron una pantalla para tapar, para que no sea visualizado o discutido cómo fueron liberados los políticos de la administración anterior.

No se calcularon las consecuencias y peligros sociales que se puede provocar.

Por eso hago mía una frase escuchada y que expone claramente la problemática que dice los presos están libres y los libres están presos.

Esta es una paradoja en donde el concepto de libertad nos lleva a examinar las amenazas que acechan y que no pasan solo por lo puramente biológico y la problemática de la sanidad, sino por la preservación de la salud mental pues estas acciones de los dirigentes afectan a la esencia del ciudadano común y cooperan a la destrucción de la esperanza. Muchos pacientes que nos consultan han perdido el sentido de la existencia pues con este confinamiento alargado en el tiempo han perdido el impulso creativo que otorga la vida.

En la complejidad de un acto analítico, donde lo importante es el dialogo y el encuentro con la diferencia para el logro de nuevas y frescas reflexiones, se incluye por supuesto todas las texturas dilemáticas en donde sin lugar a dudas se encuentra también la política, la filosofía ,la ideología con sus males y sus excesos.

Y para finalizar este escrito es importante alegar que los jubilados no tienen la culpa de hacer largas colas para cobrar en el frio y en la lluvia, los médicos y los enfermeros no tienen la culpa por morirse al atender sin los insumos correspondientes para protegerse; es claro hoy que los organismos de control fallan y dejan al desnudo nuestra sociedad que padece de esta mirada insensible y miserable.

Vuelvo al comienzo somos todos nosotros las víctimas que padecemos esta infelicidad.

Fuente:

Psicoanálisis en pandemia https://psicpandemia.blogspot.com/2020/05/por-lic-margarita-szlak-de-cederbojm_3.html