Comunicado de la Presidente a la Comunidad APM

Siempre me ha parecido que el rasgo distintivo de nuestra comunidad es la curiosidad: la búsqueda constante de respuestas y la formulación de nuevas preguntas. Y sin embargo, lo que más me sorprendió recientemente fue la pregunta de un niño a su madre, cuando caminaban por una calle totalmente vacía, protegidos con cubre-bocas y el eco de sus pisadas: ¿Por qué hay tantos pájaros cantando, tanto sol y tantas flores? ¿No estamos en Cua-ren-te-na?

Pareciera que a la naturaleza no le importara, y hay jaguares corriendo por las calles de CanCún, delfines en los canales de Venecia y osos recorriendo Chicago. Nosotros, guardados. En la agitación cotidiana, la prisa y la urgencia no nos daban tiempo de extrañar a los más cercanos, a veces ni de hablar con ellos. Por falta de tiempo, casi estábamos condenados a amar sin darnos cuenta. Ahora, en cambio, el encierro nos ofrece tal vez más presencia de la que sabemos convivir y también, la ausencia de muchos otros que considerábamos cotidianos. Para algunos, la imposibilidad de estar presente en su lugar de trabajo, afloja la certeza de quiénes son y qué hacen; va borrando una parte de su identidad. Para otros, la vida comedida y social se terminó sin despedidas, quedando únicamente el recurso tecnológico escrito, visual o auditivo, para re-encontrarse. Pero todos queremos saber si esto no cambiará nada, si todo podrá recomenzar como si nada hubiera pasado, como si no faltara nadie. Si podremos seguir siendo los mismos.

Y somos nosotros los que tenemos que encontrar esas respuestas en nosotros mismos y en cada uno de nuestros pacientes. Devolverles su propia solución para que retomen sus vidas, para que no se detengan y continúen suavemente en este tobogán, disfrutando y aprendiendo. Así nos mantenemos en la línea: indagando constantemente, con admiración, sorpresa y benevolencia, acompañando y acompañándonos unos a otros, siendo todos parte de esta comunidad psicoanalítica de APM.

Seguimos trabajando cada uno desde nuestro lugar, con los mismos objetivos de ofrecer el Psicoanálisis de más alto nivel en todas sus formas: terapéutica, educativa, práctica supervisada, acompañamiento en crisis, etc., así como atender las necesidades de los miembros de nuestra comunidad. Las oficinas continúan cerradas, pero los cursos y seminarios están vigentes y cumpliremos conforme al plan originalmente establecido de fin de semestre, aunque las ceremonias de graduación deberán posponerse hasta que podamos regresar físicamente a nuestra casa que es APM. Estamos atentos a sus comunicaciones a través del correo de Mesa Directiva: mesa_directiva@apm.org.mx

Rosa Corzo
Presidente
Asociación Psicoanalítica Mexicana, A.C.