Un reciente estudio ha revelado que individuos con un alto grado de neuroticismo y aquellos menos abiertos a nuevas experiencias tienden a manifestar síntomas más severos de insomnio. Además, la ansiedad parece actuar como un intermediario en la relación entre el neuroticismo y el insomnio. Este trabajo fue publicado en el Journal of Sleep Research.
Insomnio: un desafío para la calidad de vida
El insomnio es un trastorno común del sueño caracterizado por la dificultad para conciliar o mantener el sueño, o por despertarse demasiado temprano y no poder volver a dormir. Las personas que lo padecen a menudo se sienten agotadas al despertar, experimentando una reducción de energía a lo largo del día.
Esta condición puede ser aguda, durando unos pocos días o semanas, o crónica, persistiendo durante meses o incluso más. Entre sus causas se encuentran el estrés, la ansiedad, la depresión, los malos hábitos de sueño, ciertas condiciones médicas y el consumo de sustancias estimulantes como la cafeína.
El insomnio deteriora tanto la calidad como la cantidad del sueño, originando problemas de atención, concentración y memoria. Además, puede incrementar la irritabilidad e impactar negativamente el estado de ánimo, el desempeño laboral y las relaciones interpersonales. El insomnio crónico eleva el riesgo de desarrollar diversos problemas de salud, incluyendo hipertensión, enfermedades cardíacas, obesidad y un sistema inmunitario debilitado.
La conexión entre personalidad e insomnio
La autora del estudio, Bárbara Araújo Conway, junto con sus colegas, se propusieron examinar si los rasgos de personalidad se asocian con la severidad del insomnio. También exploraron si la ansiedad y la depresión median o moderan la relación entre el neuroticismo y el insomnio. Los investigadores plantearon la hipótesis de que las personas con insomnio mostrarían niveles más altos de neuroticismo en comparación con aquellas sin dificultades para dormir.
Los participantes fueron divididos en dos grupos: uno con insomnio y otro sin quejas relacionadas con el sueño. El grupo con insomnio incluyó a 353 individuos, mientras que el grupo de control contó con 242 participantes.
La edad promedio de los participantes con insomnio fue de 40 años, en comparación con los 37 años del grupo sin insomnio. Las mujeres representaron el 78% del grupo con insomnio y el 86% del grupo de control.
Evaluación de la personalidad, ansiedad e insomnio
Todos los participantes completaron una encuesta en línea que incluía evaluaciones de la severidad del insomnio (utilizando el Índice de Severidad del Insomnio), los rasgos de personalidad (utilizando el NEO-FFI-R), y los síntomas de depresión y ansiedad (utilizando las Escalas de Hamilton para la Ansiedad y la Depresión). La evaluación de la personalidad midió cinco rasgos: neuroticismo, extraversión, apertura a la experiencia, amabilidad y responsabilidad.
El neuroticismo refleja una tendencia a experimentar emociones negativas como ansiedad, ira o depresión, y dificultad para manejar el estrés. La extraversión captura la sociabilidad, la asertividad y la búsqueda de emociones positivas. La apertura a la experiencia refleja la curiosidad, la creatividad y la preferencia por la novedad. La amabilidad se asocia con la compasión, la confianza y la cooperación. La responsabilidad implica autodisciplina, organización y comportamiento orientado a objetivos.
Personalidad y síntomas del insomnio
Los resultados revelaron que las personas que puntuaron más alto en apertura a la experiencia y responsabilidad tendían a reportar síntomas menos severos de insomnio. Por el contrario, aquellos con niveles más altos de neuroticismo tendían a reportar síntomas más severos.
Los síntomas de ansiedad y depresión también se vincularon con un insomnio más severo. De hecho, las asociaciones entre estos síntomas emocionales y el insomnio fueron más fuertes que las asociaciones entre el insomnio y cualquiera de los rasgos de personalidad.
Conway y su equipo probaron un modelo estadístico para examinar las relaciones entre los rasgos de personalidad, el insomnio y los síntomas emocionales. Después de tener en cuenta la ansiedad y la depresión, solo la apertura a la experiencia permaneció asociada con la severidad del insomnio, y este vínculo fue muy débil.
Un análisis más profundo sugirió que la ansiedad puede mediar la relación entre el neuroticismo y el insomnio. Es decir, las personas con alto neuroticismo pueden ser más propensas a la ansiedad, lo que a su vez se asocia con síntomas de insomnio más severos.
"El presente estudio demostró que los rasgos de personalidad de neuroticismo y apertura a la experiencia son predictores significativos de la severidad del insomnio. En el caso del neuroticismo, la asociación está totalmente mediada por los síntomas de ansiedad y moderada por los síntomas de depresión," concluyeron los autores del estudio.
El estudio arroja luz sobre las conexiones entre los rasgos de personalidad y el insomnio. Sin embargo, es importante señalar que el diseño del estudio no permite derivar ninguna inferencia causal de los resultados.
Fuentes y recursos de información
Conway, B., do Carmo, M., Filho, H., Toscanini, A., Hasan, R., Alves, M., & El Rafihi‐Ferreira, R. (2025). Personality traits and insomnia: direct and anxiety‐mediated associations. Journal of Sleep Research. DOI: 10.1111/jsr.70003
Fuente: Actualidad en Psicología
https://www.actualidadenpsicologia.com/ansiedad-personalidad-insomnio-neuroticismo/
Psicoanálisis, Psicoterapia